Esta es la sopa que se llamaba de “minuit” porque a principios del siglo XX se solía tomar después del teatro.
Es casi sólida, muy sustanciosa y se sirve de primero a mediodía. Es un plato equilibrado, al estar enriquecido con huevos y queso rallado, que dan lugar a los nutrientes fundamentales.
(4 personas) Tiempo de preparación: 60 minutos
Ingredientes
★1 barra de pan de víspera
★4 cucharadas de aceite
★2 cebollas
★4 cucharadas de queso rallado
★½ l. de caldo de pollo
★3 huevos
★1 copa de vino de fino de jerez
★sal
★pimienta negra
1.Cortar el pan en rebanadas finas y tostarlas en el horno. Calentar el aceite en una sartén y freír la cebolla picada fina, muy despacio y tapada, hasta que empiece a tomar color (5 minutos tapada en el m.o. y consumir a fuego vivo).
2.Poner a hervir el caldo, añadir la cebolla frita, sazonar con poca sal (porque el caldo ya tiene) y pimienta e incorporar el queso rallado y dar unos hervores. Batir los huevos, sazonarlos y añadir el jerez.
3.Colocar el pan en una fuente refractaria, verter el caldo hirviendo hasta que se empape el pan, cubrir con los huevos batidos y queso rallado e introducir en el horno a 180º C, 20 minutos. Servir en cuanto esté gratinada.